Gastos serían de 420 mil soles en 2020 solo en organización
Ricardo Cuenca (izquierda) , ministro de Educación. Su inacción daña al deporte. Gustavo San Martín, titular del IPD, gasta a manos llenas en plena crisis sanitaria. |
Por Wilder Buleje
El viernes pasado envié un cuestionario a Gustavo San Martín, presidente del Instituto Peruano del Deporte (IPD), sobre la contratación del extenista Luis Horna para estructurar los Juegos Nacionales 2021, tema sobre el cual hice una primera aproximación en nota reciente.
San Martín ha preferido mantener la opacidad en este asunto. Sin embargo, hay algunos puntos por precisar con respecto a esos Juegos Nacionales 2021 y sobre los montos de su organización.En primer lugar, en la nota pasada mostramos un documento por el cual se le abonó a Horna 30 mil soles. En esa información se señaló que el exraquetero presentó tres documentos similares y recibió 90 mil soles.
A través de la alta dirección del IPD se me precisó que aunque la cifra es parecida, la forma cómo se pactó el acuerdo entre San Martín y Horna (el proyecto se inició en el despacho del presidente del IPD) fue: 10 mil soles mensuales a lo largo de diez meses de 2020, en plena pandemia.
La suma total de 2020 ascendió a 100,000 soles, según portal de transparencia del Ministerio de Economía y Finanzas. Es decir, no fueron 90 mil soles como informé inicialmente -tres veces 30 mil soles- sino una cifra ligeramente mayor.
Información del portal del MEF del 2020. Horna cobró 100 mil soles del Sector Educación, al cual pertenece el IPD. |
Es decir, el proyecto ideado e impulsado por San Martín bordearía los 420,000 soles solo en 2020. El silencio de San Martín no permite saber de momento si este año continúan las labores de ese grupo.
¿Juegos Nacionales 2021 para qué?
En primer lugar, el nombre Juegos Nacionales 2021 es una exageración de su creador. No son de alcance nacional y solo abarcan catorce disciplinas deportivas, las cuales están encarnadas en catorce federaciones deportivas nacionales. ¿Por qué solo 14? Misterio.
¿Y cuál es la finalidad? La gran idea del titular del IPD es darle una despedida deportiva a la delegación peruana que participará en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 (nombre oficial, por si acaso) que probablemente se realicen en julio de este 2021.
¿Y para eso gastarían 420 mil soles solo en su estructuración? ¿Qué otros egresos más representa la iniciativa de Gustavo San Martín?
Es decir, el presidente del IPD en plena pandemia por Covid-19, con números de espanto en primera y segunda ola mortal, no tuvo mejor idea que organizar una fiesta deportiva con dinero público. Mientras las familias deportivas claman por ayuda material, Gustavo San Martín gasta dinero a manos llenas como si estuviésemos en el mejor de los mundos.
Técnicos deportivos olvidados
En agosto de 2020, cuando ya estaba en marcha el proyecto de Juegos Nacionales 2021, la flamante Asociación Peruana de Entrenadores del Deporte elevó un clamor al entonces ministro de Educación, Carlos Martín Benavides, para ser incorporados en un programa de reactivación del deporte. Benavides derivó el caso al titular del IPD. ¿Qué respondió San Martín? NO.
Cabe recordar que un programa similar sí funcionó en el Ministerio de Cultura y sobre esa base los técnicos deportivos basaron su petición.
Por qué traigo a colación ese caso, para que se recuerde la falta de empatía de las autoridades deportivas con quienes día a día han trabajado por el deporte y que hoy están postergados y olvidados, en la práctica condenados a la inactividad. Cerca de 200 mil técnicos a nivel nacional.
Al actual ministro de Educación, Ricardo Cuenca, no le interesa el deporte. No lo ha dicho... no hace falta. Pero sí debería interesarle el ser humano que hay detrás de cada técnico o de cada deportista. De seguro cuando trabajaba en el Instituto de Estudios Peruano (IEP) lo pensaba, o por lo menos lo expresaba. Desconozco los motivos por los cuales perdió esa virtud en su despacho de San Borja.
Solo recordarle al ministro Cuenca, que por no gustarle el deporte a la señora Marilú Martens se creó ese despropósito llamado Legado (antes Copal, comisión organizadora de Juegos Panamericanos Lima 2019) adscrito al Ministerio de Transportes y Comunicaciones.
Si Ricardo Cuenca quisiera ser recordado con afecto por el ámbito deportivo solo se le pide que no le haga más daño con su inacción.
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